viernes, 20 de septiembre de 2024

Ciclones, apagones, bolas y noticias

Muy pocos tuvieron electricidad inmediatamente después del paso de Irma, pero otros muchos que carecieron de esa suerte me hicieron recordar...

Félix Arturo Chang León
en Exclusivo 29/09/2017
11 comentarios
Periodista-Información
Hay casos en que la noticia es tan importante como la comida para vivir. (Alfredo Lorenzo Martirena Hernández / Cubahora)

Le gustaba decir que era de Bahía Honda, y fue a la primera persona que le escuché decir que de la noticia había tantas o más definiciones que del amor. Su nombre era Evelio Tellería, y sobre su segundo apellido, solía decir “Toca… bueno Toca no, tocaba, porque ya no toco nada a esta edad.”

Fue mi primer profesor de la asignatura Técnica Periodística en 1968, y a quien le debo fatigosas horas nocturnos en una máquina de escribir cumpliendo la tarea escolar de entregarle al siguiente día una síntesis de un discurso de Fidel en cuatro cuartillas (cada una de 20 renglones de unos 70 caracteres y espacios).

Cuando se lo llevé al aula, leyó el texto, y con gestos rápidos me lo devolvió con esta indicación: ve ahora mismo y redúcelo a tres cuartillas.

Después, dijo: ve a la máquina de escribir y déjalo en dos cuartillas.

Luego, sonriente preguntó: ¿Puedes dejarlo en una sola cuartilla?

Respondí: ¡Claro que puedo! Y seguidamente le entregué una página y guardé la otra en el bolsillo.

Afortunadamente, en ese tiempo no existía todavía el sitio de redes sociales Twitter, pues me habría pedido resumirlo en un solo tuit o trino.

Alguien del aula, no recuerdo quién, le dijo que era imposible que a un periodista le pidieran resumir un discurso de Fidel en una cuartilla, pero Tellería nos convenció de que sí podría ser una orden para cumplir en un medio de prensa.

Aunque en aquel momento me pareció que se había disociado y apartado del tema sobre todo cuando dijo que los periodistas tenían que estar preparados para escribir lo mismo de pie, sentado que caminando, comer a cualquier hora y dormir en la más difíciles circunstancias, y redactar en el espacio asignado.

Al pasar los años, le agradecí esas amenas e instructiva charlas, que siempre terminaban con un: “bueno… vamos a dar la clase”, aunque faltaran pocos minutos para terminar.

Después del ejercicio de sintetizar una y otra vez, y conversar sobre cómo debe ser un periodista, empezó a leer las definiciones de noticia, y la primera fue: “Si un perro muerde a un hombre, no es noticia, pero si un hombre muerde a un perro, eso sí que es noticia.”

Era una frase de un fundador de varios periódicos británicos a los que el profesor criticó su carácter sensacionalista, y luego en voz baja, con gestos de quien busca complicidad, agregó más o menos: la verdad es que lo común, lo que pasa todos los días, no llama la atención.

Terminado el tiempo de clases, y fuera del aula dio una importante lección que recordé en estos días en que extensas zonas de la provincia de Villa Clara estuvieron sin electricidad, y por tanto, sin escuchar radio, ver televisión, ni recibir la prensa escrita, además de otras carencias propias del paso de un huracán tan potente.

Se refirió a la importancia de conocer datos como dónde está un ciclón, qué rumbo lleva, a qué velocidad se traslada, y no agregó mucho más, pero fue suficiente para demostrar la definición de que hay casos en que la noticia es tan importante como la comida para vivir.

“Y si no se dan noticias, entonces la gente corre bolas”, fue la frase que una y otra vez recordé en cada momentos, y más cuando supe que alguien publicó en un blog que hubo dos muertos en la playa de Nazábal, lo cual resultó falso porque en Villa Clara no hubo pérdidas de vidas humanas a pesar de la magnitud de los daños.

En no pocos lugares donde fui en busca de noticias, los protagonistas de ellas me asediaron a preguntas: ¿cuándo ponen la luz? ¿Es cierto que debemos esperar 20 días para que arreglen los postes eléctricos y las averías? ¿Vienen o no refuerzos de electricistas de otras provincias?

Todos querían saber qué pasaba, y mientras les explicaba, crecía mi admiración por Evelio Tellería Toca, quien dijo que la noticia era algo que todos necesitamos, una definición que me parece más de su autoría que de las leídas en libros y manuales.


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Félix Arturo Chang León

Periodista cubano de origen chino que nació y vive en Cuba. Santa Clara. Dirigió el periódico Vanguardia durante 16 años.

Se han publicado 11 comentarios


sachiel
 5/10/17 16:34

Chang, mer extrañó no ver su articulo de esta semana, aunque si lo lei en CUBADEBATE, en la polemica de las donaciones  e Isabela de Sagua. Ahora salió el Reportaje de Playa Nazabal, seria bueno nos abundara de todos esos lugares conocidos y que hay hoy.

Paloma
 2/10/17 13:42

Saludos estimado Chang. El tiempo se encarga de agregar valor a esas precisas que nos ponen nuestros maestros cuando somos estudiantes... Bueno, bueno este artículo. Durante el paso del meteoro yo permanecí al tanto por el SI  de la TV cubana    que en   cadena con la radio mantuvo informada casi con plena inmediatez los acontecimientos. Hay que decir que las redes sociales contribuyeron en gran medida con este propósito. Pero sí, estar informado es de suma importancia porque en momentos de catástrofe el desconocimiento aumenta sobre manera la angustia y de hecho la inseguridad. En Cuba, a pesar de todas las necesidades que tenemos, podemos considerarnos privilegiados en ese sentido y lo digo cuando comparo las imágenes de nuestra hermana Puerto Rico o de cualquiera de las islas del Caribe azotadas por ambos meteoros, la diferencia es enorme. Me uno a las felicitaciones al Sistema de Información Cubana además del Instituto de Meteorología quienes hacen un binomio cuadrado perfecto en tiempo de ciclones.

José Joaquín
 30/9/17 12:10

Me alegra verte de nuevo. Un abrazo.

Pedro Uría Catalán
 29/9/17 13:47

Un tema muy interesante y actualizad. Hoy el Huracán  Irma es la noticia más difundida en nuestro país y es natural. Realmente nos tuvo en tención unos días mientras se acercaba a nuestro país y al final nos Afectó y muy fuertemente.

Todos los cubanos sabemos los daños que dejan un  ciclón y más si es de gran intensidad. Lo que no todos los Cubanos tomamos las medidas y somos previsores de los riesgos que corremos y por eso ocurren las lamentables pérdidas de vidas humanas.

Noticias antes y después del Huracán en nuestro País por los medios de prensa sobran. Esto genera las bolas que la generan  los que no tienen el trabajo ni de escuchar la radio, ver la TV o las redes sociales para los que tienen acceso a ellas. Solo se dedican a repetir lo que oyen y ponerle un poquito más de su imaginación, a veces  conscientemente y otras de forma inconsciente, pero logran un efecto. Crean la duda y el comentario popular que nada tiene que ver con la verdad.

Los dichosos apagones son directamente proporcionales a los Ciclones por innumerables causas. Los fuertes vientos que derriban las líneas, los Arboles que caen encima de los tendidos etc.

Lo que sí está Claro Chang es que un Huracán genera miles de Noticias antes , durante y después de su paso y a esa noticias le incorpora el doble de bolas que genera la las personas que reitero son los más desinformados. Y los Apagones y todas las incomodidades en mayor o menor grado que genera los daños que deja un fenómeno meteorológico de este tipo a su paso.

Espero que usted y su familia no hayan tenido muchas afectaciones y confío en la rápida recuperación de nuestro país. Así que mi solidaridad total a los damnificados gravemente  de la zona Norte de nuestro País que sé que perdieron sus Casas y otras propiedades. Gracias  Pedro Uría   

Arturo Chang
 29/9/17 16:56

Afortunadamente, en Trinidad ya ustedes disponen ee un grupo electrógeno de fuel oil, lo cual les permite restablecer la electricidad en poco tiempo. Tambiién tener otra vía de alimentación que no es únicamente la proveniente de Cienfuegos, les da seguridad energética.

Me alegra que estén en mejor situación para enfrentar huracanes desde el punto de vista del suministro energético.

Gracias por sus comentarios, que son habituales.

42
CUCO
 29/9/17 10:55

Amigo Chang saludos . Muy bueno el escrito .  mi opinion es que el cubano entre otras tantas virtudes que nos adornan somos gente muy imaginativa  y tan voluntariosos que a veces somos capaces de de emular con aquel Willian B  Hearst que creo la consigna de  ¨remember de maine ¨cuando volaron aquel barco. Mire   y esto es un axioma , no hay poblacion cubana sin chismes ni bolas eso es tan imposible como que el cometa halley venga cada 50 años .  a ver  me toco vivir el ciclon  en cayo sta maria pues fui designado a cumpir tareas  antes ,durante y depues del paso del huracan .  No voy a contar lo que paso solo que fue una delas experiencias mas interesantes y complejas de mi vida. lo gracioso vino despues , cuando arribe a caibarien , en un barco pues el pedraplen como todos sabemos estaba partido, alli me encuentro aun comp de mi pueblo natal que muy preocupado me  pregunta si es verdad que fulanito de tal y dos mas estaban desaparecidos ,  fulanito es un  amigo mio  que trabaja por alla atras . lo miro y le digo  que no que en el cayo nose habian producido  bajas a pesar de la violencia del embate . otra bola fue que el ciclon se habia llevado 12 KM de pedrapen , y como esas me imagino  que haya 50 historias  en cada poblado de la provincia,  lo que digo un pueblo cubano sin chismes y bolas es como un jardin sin flores .  Es criticable regar bolas , cuando le hice el cuento al fulano de su desaparicion me miro con sorna y me dijo que si  que el estaba desaparecido pero que habia sido casi  el ultimo carro en salir del cayo  2 horas antes del ciclon  y en lugar de ir para su casa se fue para otro lugar a pasar  el evento en otra compañia y al no localizarlo se armo la gorda que es su mujer , y todos sabemos lo que pasa cuando la gorda arma una gorda  , NAda cositas  asi nos hace especiales a los cubanos y crean la gasolina  necesaria para alimentar chismes y  bolas . Chao

Arturo Chang
 29/9/17 16:53

Cuco, usted merece un reconocimiento por formar parte de los hombres y mujeres que actuaron frente al huracán Irma para minimizar los daños y en la recuperación. Así se hace revolución!.

Gracias.

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sachiel
 29/9/17 10:49

La "bola"(rumor, especulación noticiosa, chisme callejero, etc) ya es algo intrinseco del floklor cubano, es casi endemica y consustancial ante cualquier cosa no conocida. Deberia existir un San o Santa Bola, por tantos adeptos que tenemos a hablar sin confirmar nada, y lo que es peor a desvirtuar, y a propagar "bolas" más rápido que cualquier enfermedad.  Tambien creo que es un problema de afanismo, me explico: afan de tener el palo periodistico o informativo antes que nadie, o de comer mucha, pero mucha "fana" (ese vocablo lo oi por primera vez en boca de los holguineros), hablando lo que no se sabe a ciencia cierta.

Arturo Chang
 29/9/17 16:50

Una cosa es lo folclórico y otra que se trate de crear caos y confusiones de manera mal intenciobnada.

Hay que diferenciar lo uno y lo otro.

Gracias por comentar habitualmente.

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Narciso
 29/9/17 10:00

Muy buen comentario. Escrito a partir de una amplia experiencia periodística y tomando de refrente a un veterano del oficio, como lo fuera Evelio Tellería, a quien llegué, en lo personal, por la Historia, en específico a través de su libro sobre los Congresos Obreros en Cuba, texto de obligada consulta para los estudiosos de la Historia Patria.

Cierto que la noticia es el pan nuestro de cada día, pero se torna aún más necesaria en tiempos de contingencia, como ahora con Irma.

En su trasfondo este comentario de Chang le hace homenaje al encomiable trabajo de la prensa cubana en días tan difíciles como los vividos.

Felicidades por lo atinado y valedero.

Arturo Chang
 29/9/17 16:48

En 1968 estaba Tellería dando los toques finales al libro. Recuerdo que una vez, en el aula, nos comentó que le estaban diciendo que estaba redactado en una forma que no era propia de un libro. Y dijo: Yo soy periodista y.por eso lo escribo en forma de noticia, de reportaje, de artículo, periodísiticamente.

Y efectivamente, también pensé en rendirle homenaje a mi maestro.

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