¿Qué preocupa a los estudiantes de la Universidad de La Habana? (+Fotos)

Del 5 al 8 de julio se desarrolla en la capital el IX Congreso de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) a nivel nacional. Delegados de todas las provincias terminan un largo proceso de debate que comenzó en las aulas meses atrás, y que involucró en mayor o menor medida a todos los miembros de la organización.

Es así que, antes de la cita nacional, hubo asambleas a nivel de brigada (grupo), facultad, y universidad, donde cada escalón propuso los representantes para el superior, lo cual garantiza la representatividad del estudiantado y la oportunidad de tener un amplio debate que permita identificar problemas y perfeccionar procesos.

De esa forma, el congreso ha ventilado los principales temas que conforman la agenda de los estudiantes. Para identificar cuáles son hemos analizado las actas y planteamientos de los congresos de las diecisiete facultades de la Universidad de La Habana, cortesía del secretariado de la FEU de la casa de altos estudios.

Los hemos separado en siete grandes grupos: Funcionamiento de la FEU, Docencia e Investigación, Extensión Universitaria, Comunicación, Trabajo Político-Ideológico, Becas, y Otros Planteamientos, que en total suman 553.

FUNCIONAMIENTO ORGÁNICO: LA FEU DEBE PARECERSE MÁS A SUS ESTUDIANTES

Entre los temas abordados en cuanto al funcionamiento orgánico de la FEU, sobresale la preocupación de los delegados por lograr una mayor vinculación de los estudiantes a las actividades y procesos que ocurren en la organización.

La apatía de muchos de sus miembros y la falta de motivación para sumarse al movimiento, preocupan a todas las facultades. En ese sentido, recalcan los delegados, habría que mejorar la comunicación entre los dirigentes y la base, volver más fluida la labor de las estructuras y potenciar el trabajo en la brigada.

Para que sus miembros se sientan más identificados con su organización, esta debe parecerse a ellos y proponer iniciativas en las que el estudiantado se vea representado. Este es el gran reto de la FEU.

La multiplicación y aprovechamiento de los espacios para debatir los problemas fue otro de los temas ventilados en la esfera. En ese sentido, se vuelve crucial el protagonismo de los turnos de trabajo docente-educativo, incluidos cada semana en el horario, y las asambleas postcongreso, que darán seguimiento a los acuerdos y planteamientos.

Los estudiantes de la Universidad de La Habana se comprometieron con hacer de la FEU una organización que se les parezca (Foto del autor).

DOCENCIA E INVESTIGACIÓN: EL PAN NUESTRO DE CADA DÍA

Con exactamente 200 planteamientos, la esfera de docencia e investigación fue, sin dudas, la más debatida en los congresos de las facultades de la Universidad de La Habana. Más de un cuarto de las propuestas estuvieron relacionadas con la modificación del plan de estudios, aunque también fueron muy tratados temas relacionados con la asistencia a clases, el premio al mérito científico, la participación en eventos y el movimiento de alumnos ayudantes.

Por iniciativa del Ministerio de Educación Superior (MES) comenzó este curso en la mayoría de nuestras facultades la aplicación del Plan de Estudios E, que incluye la reducción de las carreras a cuatro años, lo cual supone la supresión, fusión y modificación de un gran número de asignaturas.

Las inconformidades con el nuevo plan de estudios estuvieron en el centro del huracán en el debate de la esfera de docencia. Materias que consideran importantes y quedaron fuera y otras que creen prescindibles y se mantienen preocupan al estudiantado.

En este tema, el punto más importante, tocado en casi todas las asambleas, estuvo relacionado con las irregularidades en la enseñanza del Inglés. El nuevo plan de estudios elimina la lengua como asignatura propia de la carrera, pero la mantiene como requisito para la graduación.

Así, el estudiante, antes de culminar sus estudios, pasa una prueba de Inglés donde deberá demostrar que posee el nivel B1+, bastante avanzado dentro del sistema de categorías del idioma.

Para ello cuentan desde este curso con el Centro de Idiomas de la Universidad de La Habana, donde se les impartirán clases de la asignatura, en dependencia del nivel de cada alumno.

La estrategia, en el papel, parece buena. Sin embargo, su aplicación deficiente, el desconocimiento de los estudiantes, la insuficiencia de los profesores del centro de idiomas, entre otros contratiempos, han ocasionado que a estas alturas del curso muchos estudiantes se quejen de haber dado pocas o ninguna clase de Inglés.

Una mayor participación en eventos científicos, así como la convocatoria a organizarlos con otras universidades y centros de investigación del país fue otro de los grandes temas tratados en la esfera.

A ello se suma el interés en potenciar, cuidar y estimular el movimiento de alumnos ayudantes, muy fuerte en la mayoría de las facultades, formado por estudiantes aventajados que apoyan el proceso docente y constituyen cantera de profesores de nuestra universidad.

La esfera de docencia e investigación fue la más debatida en los congresos de las facultades (Foto del autor).

El interés por la promoción del Premio al Mérito Científico, desconocido todavía por una parte del estudiantado, fue otra preocupación. Este galardón, surgido tras el VIII Congreso de la FEU, que estableció remover todo estímulo que aumentase el índice académico, premia a estudiantes con una buena trayectoria investigativa y que posean exámenes de premio.

Mención importante tiene dentro del debate la preocupación por el proyecto Educando por Amor. La iniciativa, de carácter nacional, promueve la impartición de clases por los jóvenes universitarios en las enseñanzas preuniversitaria y secundaria básica. Constituida como una de las actividades de impacto social más importantes que lleva a cabo la organización, los estudiantes se quejan de que en ocasiones hay trabas burocráticas e insuficiente atención en las escuelas que dificultan la contratación, tan necesaria para el país.

EXTENSIÓN UNIVERSITARIA: PARA EL SANO DISFRUTE

Se considera extensión universitaria a toda aquella actividad diferente del ámbito docente e investigativo, pero que contribuye a la formación integral del estudiante y su desarrollo humano. Dentro de ellas encontramos las relacionadas con los movimientos deportivo y de artistas aficionados, recreativas, los proyectos comunitarios, entre otros espacios.

Dichas actividades, aunque tienen su clímax en el segundo semestre, se desarrollan durante todo el año, transversales a las clases, con el apoyo e incentivo de la institución.

Los festivales de artistas aficionados son una de las principales actividades extensionistas (Foto del autor).

Por eso, la principal preocupación de los congresos de las facultades es la necesidad de que los profesores hagan suyo el movimiento y sean menos rigurosos con la asistencia de los estudiantes que están fuertemente ligados a la cultura y el deporte, aunque sean igual de estrictos luego en la evaluación.

La necesidad de incentivar a los muchachos para que se sigan sumando a la actividad extensionista, el valor de la correcta planificación de los juegos deportivos y los festivales de cultura, así como la importancia de restaurar al estadio universitario y devolverle al teatro Aníbal Ponce —perteneciente a la Facultad de Psicología, sede de los Festivales de Cultura— su antiguo esplendor, fueron también temas medulares.

COMUNICACIÓN Y TRABAJO POLÍTICO-IDEOLÓGICO: A TONO CON LOS TIEMPOS

Más de la mitad de los planteamientos relacionados con la comunicación, se centraron en la creación y aprovechamiento de nuevos canales para el intercambio de información entre la dirección de la FEU y sus estudiantes. En ese sentido, se llama a explotar las posibilidades que ofrecen las nuevas tecnologías, con internet y las redes sociales, ampliamente usados por la juventud.

Dentro de la esfera político-ideológica, los estudiantes recalcaron el compromiso de la FEU con la continuidad del proyecto socialista y denotaron la importancia de continuar sumando la universidad al desarrollo del país y las tareas de impacto social.

Por último, los planteamientos relacionados con las becas giraron en torno a su cuidado y mejoramiento, y el necesario contacto entre la dirección de la FEU y la de las residencias estudiantiles.

En todos los congresos, sobresalió el compromiso de los jóvenes universitarios con la transformación de su entorno y su disposición para hacer que la organización sea mejor, desde sus propios esfuerzos.

Cuando el 8 de julio quede clausurado el IX Congreso de la FEU a nivel nacional, se habrán discutido a profundidad estos y otros temas, provenientes de delegados de las 39 universidades del país que representan a los casi 125 000 que conforman la organización.

El trabajo no terminará ahí, sino que, por el contrario, constituirá una brújula y punto de partida para reinventar la FEU, a imagen y semejanza de su estudiantado.