Programa de USAID empleó a jóvenes latinos para incitar rebelión en Cuba

La agencia Associated Press ha publicado un programa encubierto del gobierno de Barack Obama, para enviar jóvenes latinoamericanos a Cuba con fines de subversión política, el cual se desarrolló después de la captura del contratista Alan Gross  y da a entender que dichos programas no se detuvieron a pesar de la conmoción  provocada por el encarcelamiento del empleado del gobierno de EEUU. Con el pretexto de una supuesta ayuda a programas de salud, viajaron a la Isla en busca de un cambio político, en “una operación clandestina que puso a los extranjeros en peligro”, asegura AP.

Desde 2009, el proyecto a cargo de la Agencia de EE.UU. para el Desarrollo Internacional (USAID) envió a Cuba a jóvenes de diferentes latitudes de Latinoamérica “con la esperanza de incentivar una rebelión”. Entre las informaciones obtenidas por la AP, uno manifestaba: “a pesar de que nunca hay total certeza, puedes tener confianza de que las autoridades no van a tratar de hacerte daño físicamente, sólo te van a asustar… Recuerda que el gobierno cubano prefiere evitar los informes negativos de los medios en el extranjero, por lo que un extranjero golpeado no es conveniente para ellos.”

Este programa de agentes viajeros, al igual que el ZunZuneo, forman parte de un esfuerzo de varios millones de dólares de la USAID para lograr cambios en países políticamente incómodos para Washington. La investigación anterior de la AP demostró que el ZunZuneo era de naturaleza política y manipuló a los abonados sin saber que el servicio era pagado por el gobierno de EE.UU. con objetivos de cambiar el régimen del país.

El programa de los agentes viajeros se inició durante el gobierno del Presidente Barack Obama, quien aseguró al comenzar su mandato un “nuevo comienzo” con Cuba, después de décadas de desconfianza, lo cual deja dudas sobre si la Casa Blanca tiene una política coherente hacia el país, añade AP. Basándose en documentos y entrevistas, la AP encontró que el programa de los viajeros utilizó tácticas de espionaje para ocultar las actividades de los agentes y además tenían códigos para comunicarse: “me duele la cabeza” significaba que sospechaban que estaban siendo monitoreados por las autoridades cubanas; “tu hermana está enferma” era una orden para acortar el viaje.

Como informa el sitio Cubadebate, con el objetivo de evadir a las autoridades cubanas, los viajeros instalaban contenidos de aspecto inocente en sus computadoras portátiles para ocultar la información sensible que llevaban y utilizaron memorias flash cifradas para ocultar sus archivos y enviar mensajes de correo electrónico cifrados. En Cuba Es ilegal, como en el resto del mundo -incluido EEUU- operar bajo la orden de programas para un cambio de régimen pagados desde el extranjero.