Llegó la hora cero de los luchadores

¿Podemos ya dar paso a una verdad de Perogrullo? Los luchadores cubanos quieren (y pueden) ganar medallas en los campeonatos mundiales. Ese deseo empezará a cobrar vida este sábado en Nur Sultán, Kazajistán. El imaginario telón bajará el próximo domingo 22. Y para entonces es muy posible ya habrán demostrado su fama. Sí, una fama que dura ya varias décadas.

LOS VARONES

El domingo, según leímos en un cable de la Agencia Cubana de Noticias, se pondrán las trusas tres de nuestros compatriotas pertenecientes al estilo grecorromano…

Uno de ellos es Ismael Borrero en su nueva división de los 67 kilogramos, luego de haber sido campeón mundial de la de los 59 en Las Vegas 2015, y de los Juegos Olímpicos de Río 2016.

Y expectación generará también una promesa-realidad como Gabriel Rosillo (97). Es que hace menos de un mes ganó de forma demoledora la medalla de oro en los campeonatos mundiales juveniles de Bucarest. Y también en agosto la de los Juegos Panamericanos de Lima 2019. Ha sido muy felicitado. Se asegura incluso que será el novato del año en nuestro deporte.

Ah… y Daniel Gregorich (87), subcampeón mundial en la categoría menores de 23 años, también en Bucarest, pero en noviembre pasado, una señal de que debe ser seguido.

El lunes le llegará su turno a Oscar Pino (130), quien ha ganado dos medallas de bronce en campeonatos mundiales, aprovechando muy bien la oportunidad que se le ha presentado por las ausencias estratégicas del gran Mijaín López, tres veces campeón olímpico y concentrado en una cuarta dorada en Tokio 2020.

La comitiva masculina la completan los libristas Yowlys Bonne (campeón mundial hace un año en la división no olímpica de los 61 kilogramos); Geandry Garzón (74) en su regreso tras haber ganado varias medallas mundiales: Alejandro Valdés (65), bronce en el de París 2017 y Budapest 2018, donde se esperaba más; Yurieski Torreblanca (86), quien resultó indetenible hace pocos días en los Juegos Panamericanos de Lima 2019. No lo dude: son libristas capaces de regalarnos la alegría de subir al podio.

Pero nos falta escribir de las mujeres…

¿MEJOR QUE NUNCA?

No vamos a descubrir el agua tibia con la siguiente afirmación: estos campeonatos mundiales parecen ser a los que la lucha femenina cubana llegará en mejores condiciones: Ello ocurre 13 años después de su bautismo de fuego. El mismo ocurrió, casi a la carrera, convocadas el último momento, en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Cartagena de Indias 2006. Ah… muchas de ellas, en alianza estratégica, provenían del judo. Sí, es verdad, ha existido un cambio de generación.

No quiero pensar demasiado en que ganaran medallas, aunque muy bien pueden, como veremos a continuación. Y no lo haré por aquello del nivel de las contrarias y el de ellas, las horas de carretera recorridas en uno y otro caso sobre los colchones.

Pero es bueno detenernos en ellas…

Se debe mencionar sin demora a Lianna de la Caridad Montero Herrera (división de los 53 kilogramos), quien se convirtió en la primera cubana que pudo ganar una medalla en campeonatos mundiales de adultos, al terminar con bronce en el de Budapest 2018, celebrado a finales de octubre.

Y es imprescindible hacerlo también con Yudaris Sánchez (68), quien un poco después se convirtió en la primera cubana campeona en un mundial, en este caso el de menores de 23 años de edad, celebrado en el mes de noviembre en Bucarest 2018.

HAY MÁS

Una de las cubanas más interesantes es Milaymis de la Caridad Marín. Le han empezado a decir (valga la exageración) “la Mijaín López de la lucha femenina”. ¿Ha sido demasiado prematuro un calificativo tan encumbrado? Eso me parece un poco. Pero la muchacha viene arrollando. Y… ¡qué valga la exageración!

Va a ser su primera asistencia a un mundial de adultos. El reto ahora será mucho más exigente. Pero todavía se escuchan ecos recientes, cuando hace menos de un mes, el jueves 15 de agosto, se convirtió en la primera luchadora cubana campeona mundial juvenil, en este caso en la categoría máxima de los 76 kilogramos.

Esa porfía se escenificó en Tallinn (en estonio: Tallinn). Y en ella nuestros compatriotas ganaron también otras dos medallas. La primera de todas fue la de plata de Yoanger Bastidas (división de los 97 en el estilo libre). Y la última también dorada perteneció a Gabriel Rosillo (97 del grecorromano). Vamos a subrayarlo: una delegación de solo tres cubanos, y… ¡los tres finalistas!

La muchacha había dicho ya algo así como “apréndanse mi nombre” cuando ganó también la corona en en los terceros Juegos Olímpicos de la Juventud, celebrados en octubre de 2018 en Buenos Aires.

“Quiero confiar en mi preparación. Voy a darlo todo. Sé que mis rivales no serán las mismas que en el mundial juvenil, aunque algunas sí. Lo repito: Quiero confiar en mi preparación”.

No olvidamos que también buscará su mejor desempeño posible Yusneylis Guzmán (50), segunda en los Juegos Panamericanos de Lima 2019.

Sí, vamos a repetirlo, no quiero pensar demasiado en que ganaran medallas, pero… ¿puedo negar que sí lo estoy haciendo un poco?

ACLARACIÓN

¿Lo escribimos ya todo sobre la participación de los luchadores cubanos en los campeonatos mundiales que acaban de empezar? ¡No qué va! Algunos lectores notaron que el periodista se quedó con una baraja debajo del brazo (¡un as!). Pero eso va a aparecer en otro combate que tendré contra la computadora…