Juan Gualberto Nápoles entrena disciplinas de saltos horizontales en el Equipo Nacional de Atletismo. Bajo su tutela se prepara el triplista Cristian A. Nápoles y también crece un grupo de jóvenes talentosos que representan el presente y el futuro del salto de longitud en nuestra tierra.
El 2018 no fue, sin embargo, un año rimbombante para sus pupilos. La lesión de Maykel D. Massó, el discreto desempeño de Cristian en la final del Mundial Bajo Techo de Birmingham y la no inclusión de Lester A. Lescay en la disputa de las preseas del Campeonato Mundial para menores de 20 años atentaron directamente contra la trascendencia de su trabajo. Nápoles lo asume, aunque entiende que la balanza también pudo inclinarse a su favor, si se tiene en cuenta, por ejemplo, que Maykel Vidal fue plata mundial entre los juveniles o que el propio Cristian, aun con déficit competitivo, saltó lo mejor de su vida en Barranquilla para titularse y fue escogido para acompañar al extraordinario Christian Taylor en la cruzada del Equipo Américas en la Copa Continental de Ostrava.
—Su valoración…
—Para mí este año (2018) fue fructífero, a pesar de que Massó no pudo recuperarse y de que Vidal se quedó en plata, cuando tenía pronóstico de oro. Él hizo una competencia buena, saltó 7.99 metros, quedándose solo un 1 % por debajo de su marca personal.
“Cristian, por su parte, lo hizo muy bien y cumplió con su propósito principal que era ganar los Juegos Centroamericanos, a pesar de no haber tenido acceso a la cantidad de competencias que hubiéramos querido.
”En general todos los atletas del grupo, a excepción de Massó, mejoraron sus marcas”.
—Lester Lescay ya superó los 8 metros, pero tuvo una incursión mundialista muy discreta.
—Lescay es un talento que viene creciendo. Saltó 8.07 metros aquí en La Habana, pero no pudo estar en la final del mundial. Le afectó enfrentarse a una primera experiencia internacional donde tenía que saltar para clasificar. En Nairobi hubo final directa, ahora en Tampere no, y en la clasificación no estuvo bien.
—También maneja los hilos de la carrera deportiva de Yanisley Carrión, una atleta que cumplirá 17 años, con un resultado personal de 6.28 metros en el salto de longitud y condiciones para incursionar en pruebas de velocidad.
—Carrión podía haber estado en el mundial (sub 20), pero es una atleta muy inestable desde el punto de vista psicológico. Ella todavía no es del todo consciente de las potencialidades que tiene, tanto desde el punto de vista técnico como físico. Le falta madurez y esto la ha limitado a la hora de ser tomada en cuenta.
“No obstante, ella también tenía opción de ir a los Juegos Olímpicos de la Juventud debido a su marca, que la mantiene de líder del área panamericana, pero la Comisión Nacional decidió que no estuviera. Pienso, particularmente, que fue una determinación drástica; que se le podía haber dado la oportunidad de participar a la muchacha”.
—Imagino que sobre este punto están trabajando con fuerza…
—Sí, por supuesto. Con ella estamos haciendo un trabajo individualizado fuerte. Los psicólogos han estado presentes, sobre todo la doctora Damaris, que es la misma que trabajó con Yaimé Pérez este año, con excelentes resultados.
—Usted hablaba de que el calendario competitivo internacional de Cristian Nápoles no fue suficiente. ¿Cuáles son sus consideraciones sobre el tema?
—Creo que a la hora de analizar el destino de Cristian se tuvo en cuenta la última competencia internacional que tuvo en invierno, el Mundial, y se valoró esto por encima de otros resultados como el del año anterior, cuando aun siendo juvenil había sido cuarto en el Campeonato Mundial de mayores de Londres.
“A partir de su resultado en Birmingham se le dieron las oportunidades. Como no estuvo bien allí, tuvo menos oportunidades.
”Su periplo competitivo fue bastante limitado para el verano y, a pesar de eso, tuvo una gran actuación en Barranquilla (oro con marca personal de 17.34 metros) y fue parte del Equipo Américas en la Copa Continental, donde fue el del segundo mejor resultado, con 17.07 metros, aunque por el sistema de la competencia aparezca como quinto”.
—Se dice que es muy difícil insertar a nuestros atletas en los principales mítines. Que el deporte es cada vez más mercantil y que los organizadores solo quieren a los mejores.
—Todo esto es cierto, pero un atleta que es cuarto del mundo siempre va a ser del interés de los organizadores. Te pongo un ejemplo, Godfrey Khotso Mokoena fue plata en 2009 y sigue apareciendo en Europa. Es una cuestión de gestión. Tengo que decir que después, cuando estábamos haciendo la base de preparación en República Dominicana, nos brindaron competencias, pero las rechacé porque ya habíamos diseñado la preparación de otra manera.
—De vuelta a Cristian, su comportamiento competitivo describe cierta inestabilidad en su rendimiento. Es un atleta de más de 17 metros, pero le cuesta sostener este resultado.
—Tiene que competir al más alto nivel. Siempre que pueda, tiene que estar ahí porque él necesita codearse con los mejores. La competencia es el examen final y esa experiencia es la que te moldea.
—¿Cuál es el estado actual de Maykel Massó?
—Maykel sufrió la agudización de una tendinitis en su pierna de despegue. Una dolencia que llaman “rodilla de saltador” también lo afectó, pero todas esas molestias han desaparecido y su tendón rotuliano está sano.
“Ahora está recuperado totalmente para entrenar. Hay que fortalecerlo físicamente para más adelante insertarlo en las competencias.
”Maykel es un león, la gente de Santiago de Cuba es guapa por naturaleza, lo llevan en la sangre. Yo soy habanero y lo reconozco, hay que quitarse el sombrero con la gente de Santiago. Está demostrado en el deporte y en la vida. Y Maykel es así, está enfocado, quiere imponerse, en su mente no hay nada que sea imposible.
”Él va a tener oportunidades como las tuvo este año, aunque asumo que no debió competir tan seguido. En ese sentido lo apuramos un poco, presionados también por la operatividad de este negocio. Las competencias aparecen y hay que decidir si se aprovechan o no”.
—Yo tenía entendido que el calendario competitivo se diseñaba en correspondencia con la preparación. Es decir, que la llamada ruta crítica de competencias se establecía con anterioridad.
—Antes se hacía así, te brindaban las competencias y tú tenías la posibilidad de escoger las que te convenían para apuntalar el trabajo. Pero últimamente no ha sido así.
—¿Es responsabilidad de Jorge Luis Aguilera o hay otros factores conocidos que inciden en ello?
—Yo creo que tenemos un buen manager, Aguilera se mueve y busca por donde quiera, pero la cosa es más compleja actualmente. Sobre todo, para las segundas figuras que ya no se logran insertar como antes, a la par de los que ya están establecidos. Es real que la mercantilización del deporte es mayor, y que la garantía de estar en las grandes competencias es el resultado porque un atleta sin resultados de élite no vende.
—Las metas…
—Maikel Vidal y Lester Lescay se enfocarán en los eventos de su categoría. En su caso tienen por delante el Campeonato Panamericano juvenil, aunque no quedan exentos de ir a alguna competencia de mayor categoría, todo está en sus manos, son saltadores que en cualquier momento pueden sorprender.
“Cristian y Massó tienen los Juegos Panamericanos como compromiso, aunque tenemos la vista puesta en el Mundial. Podemos llegar en buena forma, trabajamos para el Panamericano y con un PDC (preparación directo a competencia) se enfrenta el mundial”.
—La ausencia de la pista…
—Está claro que la pista nos afectó, pero pudimos cumplir con el compromiso de la temporada pasada. Hubo muchas variantes, en Cuba y fuera, pero es cierto que hace falta. Ahora mismo no sabemos cuándo terminarán los trabajos, pero tampoco vamos a frenarnos por eso. Los cubanos somos diferentes, la vamos a guapear en Lima, con o sin pista.
Términos y condiciones
Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.