Durante siglos, potencias colonialistas se disputaron la posesión del territorio cubano por su valor geográfico. La Corona española mantuvo el poder hegemónico en Cuba hasta 1898, pero siempre en disputa con otras potencias coloniales de la época.
En 1741 la armada británica intentó tomar Santiago de Cuba mientras en territorio guantanamero creó la colonia llamada Cumberland. En ambos casos fracasó el Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte, pero en el año 1762 los británicos lograron tomar La Habana y sólo devolvieron la plaza a España a cambio de la Florida.
Años después, políticos británicos abogaron por entregar a España el Peñón de Gibraltar a cambio del archipiélago cubano.
¿Por qué ese interés sostenido de la Corona británica en la posesión de Cuba?
Geográficamente, Cuba era (y es) la llave del Golfo de México y por extensión de todo el Caribe, como está expresado en el escudo nacional...
Luego de extenuantes travesías por el Atlántico el magnífico puerto de La Habana ofrecía seguro refugio y abastecimientos para continuar viaje hacia la América continental y la zona caribeña. Paralelamente, y debido a su situación geográfica tropical, Cuba producía grandes riquezas.
No fue sólo el imperio británico el único interesado en la posesión de nuestro país. Isla de Pinos -parte del archipiélago cubano- estuvo en la mirilla de otros intereses europeos. En 1838, el rey Leopoldo I de Bélgica, propuso a España comprarle el actual territorio de la Isla de la Juventud, pero sin éxito. Sin embargo, los más interesados en la geografía cubana no fueron los europeos.
John Quincy Adams, presidente de Estados Unidos de América en 1823, elaboró la tesis de la fruta madura respecto a Cuba. Según este manifiesto político, Cuba terminaría irremediablemente anexada a la unión norteña. En ese planteamiento se evidenció el interés yanqui por la ubicación geográfica del excelente puerto habanero como escala hacia el sur del territorio de la naciente potencia americana.
Incluso, en 1848 el presidente James Polk incluyó en su programa de gobierno la compra oficial de Cuba por 100 millones de dólares oferta que se elevó finalmente a 130 millones de dólares, cifra impresionante para la época.
En 1889 apareció un artículo en The Manufacturer, diario estadounidense, llamando a la anexión de Cuba por intereses geográficos y económicos.
El 25 de marzo de aquel año, José Martí respondió desde las páginas del Evening Post, de Nueva York, y conocedor del valor geoeconómico de Cuba expresó: "Ningún cubano honrado se humillará hasta verse recibido como un apestado moral por el mero valor de su tierra..."
Cuba es un archipiélago de poco más de 110 mil km2 situado estratégicamente en las Antillas. Sin duda, la posición geográfica de este país influyó, y hasta determinó, parte importante de su historia.
kinath
2/8/12 12:05
Por todo eso y más...ORGULLOSA VIVO, DE SER CUBANA
Términos y condiciones
Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.