La alimentación del diabético

Los conceptos nutricionales para los pacientes diabéticos son similares a los que debe mantener las personas sin esta enfermedad pero deseosas de mantenerse bien nutridos.

Confeccionar una estrategia de buena  alimentación comienza por el empeño del propio enfermo. Debe tener la disposición y el buen juicio para hacer los cambios necesarios en sus comidas diarias con el fin de conservar un adecuado estado nutricional y al mismo tiempo, mantener controlada su diabetes y su peso corporal.

Su alimentación debe conducirlo a mantener un peso adecuado o practicar las correcciones necesarias para alcanzarlo, junto con una actividad física programada.

La alimentación, además de correcta, debe ser variada, apetitosa y equilibrada, aprendiendo y utilizando los más modernos conceptos y recetas de la nutrición actual.

Sus comidas deben ser fraccionadas a lo largo del día, incrementando el consumo de frutas, verduras, cereales integrales y  legumbres.

Los lácteos deben ser descremados.

Debe preferir pescados, aves y huevos como base proteica de origen animal y combinar con proteínas vegetales como las encontradas en las legumbres.

Las grasas deben limitarse a las de origen vegetal, utilizando en lo posible el aceite de oliva virgen extra. Es preciso evitar las grasas saturadas de las carnes rojas así como las grasas trans, presentes en alimentos ricos en carbohidratos simples como galletitas con cremas o dulces.

Debe preferir los carbohidratos complejos presentes en los alimentos integrales, frutas y vegetales. Relegar los simples o industriales a cantidades menores.

La fibra vegetal, 35 o 40 gramos diarios aproximadamente, puede ayudar a bajar el nivel de la glucosa sanguínea, pues es una sustancia de origen vegetal y no se absorben por el intestino, demorando la asimilación de los carbohidratos.

Se recomienda ingerir alimentos con elevado contenidos de fibra (pan, galletas, cereales integrales) debido a que el aumento de la glucemia después de las comidas es más lento.

LAS COMIDAS DIARIAS DEL DIABÉTICO

El consumo de alimentos debe distribuirse entre seis comidas diarias donde se comprende: desayuno, almuerzo, comida, merienda a media mañana y a media tarde y una cena ligera antes de dormir. Las calorías y los nutrientes deben distribuirse lo más uniformemente posible en estas seis etapas de consumo.

Cuando se va a realizar un esfuerzo físico desacostumbrado en duración e intensidad, como son los ejercicios físicos programados, se debe ingerir previamente algún alimento ligero, como frutas, con el fin de evitar una hipoglicemia.

LOS PADRES DE LOS NIÑOS DIABÉTICOS

Deben educarse en todo lo relacionado con una correcta alimentación de sus hijos. Muchos niños comen con una pantalla encendida delante de sus ojos  aumentando las posibilidades de obesidad.

Quien se alimenta con un dispositivo delante, niño o adulto, no sabe lo que está comiendo, no aprecia las texturas, sabores y olores, no disfruta de la comida y pierde la noción de las cantidades, con lo cual puede llegar a comer mucho más de lo necesario.

Si los pequeños comen entretenidos con estos equipos derivados de modernas tecnologías es porque también las usan mucho en el resto de su tiempo libre, por lo cual son niños muy sedentarios y eso no ayuda para nada a su salud ni al control de la diabetes.

Los niños y los adolescentes diabéticos deben sentarse a la mesa concentrados en sus comidas y sin realizar ninguna otra actividad. Es un buen momento para educarlos en una adecuada nutrición.

LA EDUCACIÓN DEL DIABÉTICO EN RELACIÓN A LAS COMIDAS

En el corto espacio de este artículo hemos intentado resumir aspectos esenciales en lo referente a la alimentación adecuada del paciente diabético.

Pero las diferentes modalidades de esta enfermedad como son los diabéticos tipo 1 y 2, los niños, los ancianos, las embarazadas o quienes lamentablemente ya presenten alguna complicación, deben recibir orientaciones y aclarar sus dudas en la consulta de su médico de asistencia o de un especialista en nutrición con el fin de recibir una amplia y adecuada educación diabetológica.