El secreto de la comida sin sal

“Limita la sal oculta” y “elige comidas saludables” son los temas elegidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) reflejada en esta campaña para significar la importancia de disminuir la ingestión de la sal tanto la visible como la  oculta en nuestra alimentación diaria.

Los tres pilares de la Organización Mundial de la Salud para la reducción exitosa de la sal alimentaria son: nueva formulación de productos industriales, elevar la conciencia de los consumidores sobre los peligros de la sal, y por último, la realización de campañas de educación y de cambios ambientales para elegir las opciones saludables más fáciles y asequibles para todas las personas.

LA SALUD Y LA VIDA

Ingerir más de 5 gramos de sal, o su equivalente de  2,300 miligramos de sodio cada día, aumenta el riesgo de hipertensión arterial. Esta enfermedad es el principal factor de riesgo para los fallecimientos por infarto cardiaco, accidentes cerebrovasculares e insuficiencia renal.

Disminuir el consumo de sal, e incluso consumiendo comidas sin sal, se pudieran salvar unas 8,5 millones de vidas en todo el mundo en el plazo de diez años pues se reducirían los casos de presión arterial elevada.

EN LAS AMÉRICAS

En varios países de las Américas se consumen elevadas cantidades de sal. Como ejemplo tenemos a Argentina con un consumo diario promedio de 12 gramos, Brasil con 11 y en Canadá, Chile y los Estados Unidos  sus ciudadanos consumen de  8,5 a 9 gramos de sal por día.

Argentina ya se convirtió en el segundo país a nivel mundial después de Sudáfrica en aprobar una ley para disminuir el consumo de sal de su población.

En este precepto se determina un plazo de tiempo en relación a la industria de los alimentos procesados para reducir la sal en sus productos, la obligación de colocar etiquetas nutricionales donde se adviertan los riesgos de propasarse en el consumo de sal, limitar el tamaño de los paquetes donde ella es vendida y además se establecen determinadas penalidades a quienes no cumplan con dichas disposiciones.

Existen programas internacionales con el objetivo disminuir gradual y de forma sostenida la ingestión alimentaria de sal a través de metas nacionales. La meta internacionalmente propuesta es consumir  menos de 5 gramos de sal al día por persona para el año 2020.

Cuba junto con Brasil, Canadá, Chile, Costa Rica, Estados Unidos, México, Surinam y Uruguay cuenta con su estrategia nacional para reducir el consumo de sal.

LA POBLACIÓN VULNERABLE

La mayoría de las personas no se da cuenta cuánta sal están consumiendo diariamente. Los niños son especialmente vulnerables.

Es muy importante conocer la cantidad de sal contenida los alimentos que ingerimos. Y mientras se pueda, elegir los que tienen menos sal. Por supuesto, el ideal sería las comidas sin sal y sin sodio.

Pero para eso se necesita, entre otras cosas, etiquetas con una clara información nutricional mostrando la cantidad de sal contenida en cada producto.

ES RECOMENDABLE

Una alimentación saludable eliminando en lo posible productos industriales ricos en sal o en sodio junto con comidas sin sal en la alimentación casera, es una conducta prudente en relación a nuestra salud y la de nuestros familiares.

No es nada difícil confeccionar sabrosos platos de comidas sin sal utilizando las especias y las hierbas aromáticas tal como aparecen en las más de cien recetas publicadas en el libro cubano COMER… PERO SIN SAL y en muchas otras publicaciones de fácil acceso.

Todo es cuestión de proponerse a cuidar de la salud a través de la más saludable alimentación donde se incluyen las comidas sin sal.

RECETAS CUBANAS DE COMIDAS SIN SAL

Macarrones a la mostaza

Ingredientes

1 paquete de macarrones preferentemente integrales
1/2 pastilla de caldo de carne, pollo o chorizo
2 cucharadas de queso rallado, preferentemente bajo en grasa
3 cucharadas de mostaza
2 cucharadas de aceite vegetal, preferentemente de oliva extravirgen

Elaboración

Cocer los macarrones con abundante agua durante 20 minutos. Escurrirlos. Agregar el aceite y la mostaza y rehogar. Unir el queso con la media pastillita pulverizada. Echar la pasta en una fuente y cubrir con este preparado. Servir inmediatamente.

Croquetas de pollo

Ingredientes

¼ de pollo grande
1 puerro
1 cebolla
1 zanahoria
½ litro de leche, preferentemente descremada
½ litro de agua
5 cucharadas de aceite vegetal, preferentemente de oliva extravirgen
1 taza de harina de trigo, preferentemente integral
Nuez moscada al gusto

Para rebozar y freír:

3 Huevos
Pan rallado, preferentemente integral.
1 taza de harina de trigo, preferentemente integral.
Aceite vegetal, preferentemente de oliva extravirgen

Elaboración

Cocer el pollo en una cazuela cubierto con agua y junto con las verduras limpias, durante 15 o 20 minutos. Una vez cocido el pollo, desmenuzar la carne. Hacer una crema bechamel con el aceite, la leche y el caldo de pollo. Rectificar el punto de nuez moscada. Agregar el pollo desmenuzado. Remover cuidadosamente. Bajar del fuego y dejar que la masa enfríe. Una vez fría la masa, coger porciones con una cuchara y formar las croquetas. Pasarlas por harina, luego por huevo batido, y por último por pan rallado.
Freírlas en una sartén con aceite muy caliente.